San Nicolás de los Arroyos. En un discurso en el marco de Expoagro, el presidente de la Nación Javier Milei, destacó los avances en los primeros meses de su mandato y reiteró su compromiso con un modelo económico y social que busca eliminar las distorsiones que históricamente han durado el desarrollo del país. «No dejo de reconocer que son una aberración las retenciones».
En un ambiente cuidado de prensa, de participantes, Milei hizo referencia a los principales aspectos que, para él , son importantes en el desarrollo de su gobierno. Sin dudas que el campo obtuvo un aparte de esos beneficios, como por ejemplo la baja de retenciones a los principales productos, pero que desde las entidades no dejan de remarcar que son necesarios otros aspectos, como el de seguir hacia una baja total de los DEX, que por ahora parece inalcanzable y no está en el ánimo de Milei y el buen Toto.
Reforma del Sistema Productivo y Económico
El presidente comenzó su alocución destacando las medidas implementadas para transformar la economía argentina. “Hemos eliminado las prohibiciones y cupos en la exportación de granos y carnes, y también hemos eliminado los precios máximos para los alimentos, lo que permitirá un mercado más libre y competitivo”, subrayó. En ese marco, se destacó la eliminación de los fideicomisos y la reducción de los aranceles a la importación de insumos clave como fertilizantes, herbicidas y sistemas de riego. Un punto central del discurso fue la implementación de la competencia de monedas, una medida inédita que busca eliminar el riesgo de cambiario y ofrecer créditos en litros de leche para tamberos y en kilos de capón para los productores porcinos.
El éxito de las promesas cumplidas
A lo largo de su intervención, Milei enfatizó los avances alcanzados en comparación con las promesas de campaña. “Cumplimos con el 78% de lo prometido en tan solo un 25% del tiempo de gobierno”, afirmó, al tiempo que detallaba la sorpresa al descubrir que la ejecución de estas promesas había alcanzado el 97%. Esto refleja, según él, un gobierno que no solo cumple lo prometido, sino que también actúa con una eficacia inédita, “cumpliendo más de lo planeado”.
El modelo de desregulación y el trabajo de los ministros
El presidente destacó, en particular, el trabajo de su equipo de ministros. Mencionó a Federico Sturzenegger, Ministro de Economía, quien lideró una política de desregulación que ha logrado hacer de la Argentina un modelo de exportación. Asimismo, se destacó la labor de otros ministros en situaciones de emergencia, como la ayuda enviada a Bahía Blanca luego de un temporal devastador, donde seis ministerios trabajaron activamente para la recuperación de la ciudad, demostrando una gestión eficaz ante situaciones imprevistas.
Seguridad, justicia y déficit cero
Uno de los aspectos más contundentes del discurso fue el compromiso con la seguridad. Javier Mieli reafirmó su postura ante el crimen organizado: “Los malos son los que rompen, queman autos y amenazan, y esos deben ir presos”. De esta manera, reafirmó su estrategia de aplicar justicia con firmeza, defendiendo a los ciudadanos de aquellos que socavan el orden y la paz social. La seguridad, para el presidente, es uno de los pilares para garantizar un futuro próspero y estable.
También, explicó que el superávit fiscal es esencial no solo para reducir impuestos, sino para tener la capacidad de enfrentar tragedias y emergencias. En este sentido, destacó que el superávit fue clave para poder enviar 200.000 millones de pesos a Bahía Blanca tras el desastre natural. Resaltó que, en lugar de recurrir a la emisión de dinero, el gobierno logró superar la crisis sin aumentar la inflación ni afectar la economía de los argentinos.
Luego, el presidente abordó el tema de la competencia fiscal entre provincias. Sostuvo que el país necesita un modelo verdaderamente federal en el que haya competencia fiscal, permitiendo que tanto las empresas como los individuos elijan el lugar más conveniente para trabajar, en función del costo tributario y los servicios ofrecidos. Este cambio, según el presidente, contribuirá a erradicar la voracidad fiscal de las administraciones locales.
Siguiendo con la cuestión fiscal, también hizo una crítica a aquellos gobernadores que, a pesar de pedir la baja de impuestos, no la implementan en sus provincias. Subrayó que no tolerará más estos “juegos políticos” y pidió a los gobernadores que actuaran con coherencia y en beneficio de sus provincias, no de intereses particulares.
El modelo de país: de la Escasez a la abundancia
Por último, Javier Milei expresó su visión de futuro para Argentina. Planteó que el país tiene el potencial de convertirse en una de las cinco grandes potencias mundiales en las próximas décadas. Sin embargo, para lograrlo, es necesario abandonar el modelo de escasez y abrazar las ideas de la libertad y el trabajo. “Queremos ser un país en el que hacer lo correcto sea sencillo y actuar incorrectamente, muy costoso. Queremos una sociedad donde los que hacen las cosas bien prosperen y los que las hacen mal enfrenten consecuencias”, afirmó.
Con una firme declaración de principios, concluyó su discurso con un llamado a la acción, señalando que el gobierno no descansará hasta eliminar las distorsiones y garantizar un futuro de prosperidad para todos los argentinos. «¡Viva la libertad, carajo!», cerró, dejando en claro que el compromiso con el cambio y la transformación es inquebrantable.
En resumen, se puede vislumbrar que el gobierno de Javier Milei tiene un compromiso con el campo en lo ético-moral, ya que no se pierde ningún evento de Expoagro o del campo, para mostrar el apoyo al sector y sobre todo al ligado con Nicolás Pino, Presidente de la Rural, quien estaba sentado en primera fila y fue al único que saludó el presiente. Desde lo práctico las medidas llegaron pero para el campo tiene gusto a poco. «Falta que la baja de retenciones continúe y que de una vez por todas este hombre plasme lo que dijo en campaña, que nos iba a mejorar la situación de los productores, por ahora solo se ve una curita en una herida grande, pero antes que lo K prefiero cualquier cosa», dijo un dirigente confederado.
Por lo dicho, a Milei le espera sólo un desafío: «No perder la confianza que le dió el sector que lo apoyó, lo sigue apoyando, ¿y lo seguirá si no toma medidas?.