Ximena Rojo Brizuela, productora tabacalera de Jujuy e integrante de CASAFE, compartió su experiencia en el uso de productos biológicos en el marco del 1° Congreso de Productos Biológicos realizado en Rosario.
En diálogo con Valor Agregado Agro, contó cómo lograron transformar su sistema productivo con la incorporación de trichodermas, logrando una fuerte reducción en el uso de fungicidas.“Hace 20 años, en los almácigos flotantes de tabaco hacíamos entre 10 y 12 aplicaciones de fungicidas durante los dos o tres meses del ciclo. Hoy solo hacemos dos, el resto lo manejamos con trichoderma”, explicó Rojo Brizuela.
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La clave, según relató, fue comenzar a inocular el sustrato con trichoderma antes de la siembra y luego realizar aplicaciones por aspersión para mantener su población activa en el sistema. El resultado fue un control efectivo de enfermedades, menos intervenciones químicas y una mejora en los análisis de residuos, fundamentales para acceder a mercados externos.
“El tabaco es un cultivo muy sensible y de ciclo largo, de casi 11 meses. Tenemos muchas enfermedades fúngicas y los compradores exigen análisis de residuos muy estrictos. Los biológicos nos permiten cumplir con esos estándares”.
Además de trichodermas, en el lote también monitorean la presencia de controladores biológicos naturales, como una vinchuca (más pequeña que la del Mal de Chagas) que actúa contra gusanos cortadores de hoja. “Buscamos productos más selectivos que no afecten a esos aliados”, señaló.
La experiencia también se amplía a otras herramientas como bauberias y micorrizas, en busca de un manejo cada vez más sustentable.
En cuanto al proceso de cosecha, Rojo Brizuela explicó que el tabaco se recolecta manualmente durante tres meses, lo que implica una exposición prolongada del cultivo a plagas y enfermedades.
“Una vez que empezás a cosechar, el tiempo de carencia es muy corto, por eso los biológicos se vuelven aún más importantes”, subrayó.
Finalmente, destacó la pasión que genera este cultivo:“Así como es un vicio consumirlo, es un vicio producirlo. El tabaco todo el tiempo te desafía, y cuando creés que lo entendés, aparece algo nuevo. Así es la agronomía”.